lunes, abril 18, 2005

LA PEOR PESADILLA

Después de tantas cosas y simulada tolerancia, ¡por fin!, ¡te fuiste!. Lo digo con alivio, ha quedado un vacío precioso, de esos que satisfacen el alma de quien lo vive. Como volver a nacer en una extraña tranquilidad casi meditativa. Cercano a un rivotril( ansiolítico)que adormece la angustia de volverte a ver. No me malentiendas, creeme cuando digo que comprendo tu complicada enfermedad, esa que te hace ver agresión cuando no la hay, esa que te hace odiar a todos porque piensas que te vomitamos.
En realidad podemos ver tus habilidades, la de gran líder, la de unificadora de causas y tu don de gente cuando así lo decides. Pero padecerte raya en la violencia.
Muchas veces tuve ganas de gritarte y darte un zape para que te callaras, también quise contestar a muchos de tus comentarios llenos de ignorancia.
No sé qué es lo que te sobra más, si la ira o la estupidez. Lamento el daño que le haces a tus hijos y lamento el que te haces a tí misma porque tu ego miserable, tu mínimo respeto y tu megalomanía no dejan de perseguirte. ¿Creiste que lo disfrutabas?. Estás muy muy sola y además tienes mucho miedo.
Me alegro mucho de que hoy se fue mi peor pesadilla y es probable que no la vuelva a ver. Por primera vez ella se fue de mí y no fui yo la que primero salí corriendo.
Pienso en este como el primer golpe cetero a la castración que me persigue.